Sigue de la primera parte. Continuamos desgranando los principales mitos que rodean al controvertido mundo de los esteroides.
MITO
El lugar de la inyección no es relevante.
Realidad: Un estudio realizado por Minto et. Al. En 1997 examinaba las diferencias entre inyectar una sustancia en el deltoides (hombro) o en los glúteos (trasero). Aunque nos gustaría asumir que si nos inyectamos 100 mg de nandrolona en el cuerpo, no importa el lugar concreto donde lo hagamos, la realidad no es así. Inyectarse en los glúteos provoca que haya una concentración en sangre del esteroide inyectado mucho mayor que si lo hacemos en el hombro. Dicho de manera más simple, los hombres que recibieron inyecciones en el glúteo acabaron con mucha más nandrolona en su torrente sanguíneo. En términos prácticos, si alguien se inyecta 1 ml de un esteroide anabólico a la semana; obtendrá mejores resultados si lo hace en los glúteos (o en los cuádriceps) en lugar de en otra parte. Además, los chicos que se inyecten diariamente una sustancia, ¡necesitarán hacerlo en un sitio donde no se les vean las cicatrices!
MITO
Mientras que la cantidad en miligramos sea la misma, la concentración no importa.
Realidad: Parece razonable decir que si alguien se inyecta 100 mg de nandrolona (por poner un ejemplo), le va a pegar igual sin importar si esta viene en 4 ml que en uno (es decir, 4 ml con una concentración de 25 mg o 1 ml con una concentración de 100 mg), ¿no?
Bien, pues esto es falso. Minto (el investigador del mito anterior) echó un vistazo al volumen de Nandrolona por inyección y estudió la cantidad en sangre de la sustancia al final. Este hombre descubrió que las inyecciones más concentradas (las de 100 mg/ml) producían una mayor concentración del esteroide en sangre que las inyecciones de 25 mg/ml. Sí, lo estás entendiendo bien, a pesar de que la cantidad en mg de la sustancia era exactamente la misma, la concentración de esta en sangre fue mayor con las inyecciones de 100 mg/ml. Esto significa que por ejemplo el Equibold 350 (un Equipoise con 350 mg/ml del Anabolic Research Laboratories) es mejor producto que el Ganabol (50 mg de la sustancia por ml) inyectándose la misma cantidad de boldenona.
MITO
El Equipoise (boldenona) funciona de manera similar al Deca-Durabolin (Nandrolona).
Realidad: Estos dos EAA’s se han considerado intercambiables desde que las primeras series del Underground Steroid Handbook fueron publicadas (un boletín escrito por el difunto Dan Duchaine). Cuando Dan introdujo por primera vez el Equipoise al mundo del culturismo, afirmó que un vistazo rápido a su estructura nos revelaba que probablemente actuaba de manera similar al Deca-Durabolin. Bien, pues nada puede estar más lejos de la realidad.
La nandrolona es una progestina, un esteroide anabólico derivado de la 19-nor testosterona, mientras que la boldenona es simple testosterona con un doble enlace adicional. Si nos fijamos en sus características (conversión a metabolitos estrogénicos y a metabolitos 5a- reducidos) encontramos muy pocas similitudes entre los dos fármacos. Y mientras que el Equipoise tiene reputación de incrementar el apetito, el Deca-Durabolin la tiene de curar heridas y aliviar el dolor articular. La nandrolona posiblemente causa más retención de líquidos que la boldenona; aunque, cuando entramos en esos términos, empezamos a hablar de elementos muy subjetivos.
En realidad, estos dos fármacos son bastante diferentes, pero a causa de un error cometido hace un par de décadas; todavía vemos ciclos en los que estos fármacos se utilizan de manera intercambiable.
MITO
Debes tomar cardo mariano en ciclos con orales.
Realidad: Mientras que este compuesto ayuda a ‘’proteger’’ tu hígado, el cardo mariano reduce eficazmente los niveles de los receptores de andrógenos nucleares y regula a la baja muchos genes regulados por andrógenos principalmente mediante la inhibición de la actividad de transactivación de los AR, y también puede inhibir la localización nuclear del receptor de andrógenos. El cardo mariano también tendrá un efecto inhibitorio sobre el factor de crecimiento insulínico (IGF) medido por el receptor de señalización vial.
De todas formas, hay expectativas de que esta sustancia también es anti-catabólica. Aun así, como es obvio, es una tontería incluirlo intraciclo. Una alternativa bastante mejor es la Prunella Vulgaris, que protege las células del hígado y activa el Aril-receptor de hidrocarburos, permitiendo de ese modo que funcione como un anti-estrógeno también. Siempre y cuando alguien tome esteroides orales, debe usar un protector hepático que no comprometa las ganancias del ciclo.